Kmart Australia está cambiando los estantes de las tiendas por madera y está utilizando capas base de espuma en la parte trasera de la casa para mejorar la legibilidad de las etiquetas de identificación por radiofrecuencia (RFID) adheridas a la ropa.El minorista está en el proceso de etiquetar toda la ropa en sus tiendas para que un robot llamado TORY la lea, lo que le brinda una imagen más precisa del inventario en la tienda.El gerente de implementación de RFID, Adam Gradon, dijo en una reunión de la Coalición RFID convocada por GS1 Australia a fines de la semana pasada que el minorista tendría el 100 por ciento de la ropa etiquetada a nivel de proveedor, es decir, en el fabricante en el extranjero, y robots autónomos capturando datos de las etiquetas en todas las tiendas australianas. por navidadSin embargo, reveló que Kmart está teniendo que cambiar algunos de sus accesorios y accesorios en la tienda para garantizar que el robot pueda leer las etiquetas.Las etiquetas RFID y el metal no se mezclan: el metal puede reflejar los intentos de leer la etiqueta o crear interferencias en la antena de la etiqueta.“Para aquellos que han estado en una tienda Kmart, mucha de nuestra ropa se encuentra en estantes de metal, por lo que nuestra solución ha sido reemplazar los estantes de metal con estantes de madera”, dijo Gradon.“En nuestro back-of-house también tenemos metal. Es curioso la cantidad de metal que encuentras en el back-of-house cuando comienzas a usar RFID y deseas que sea otra cosa.“Hemos tenido que aplicar algunos métodos [de remediación] allí también.Lo que hacemos es colocar tapetes de espuma debajo de nuestras estanterías de metal, lo que nos brinda una barrera contra el metal”.Gradon dijo que los esfuerzos de optimización adicionales se habían centrado en mejorar la certeza de las lecturas de etiquetas por parte de TORY a medida que atraviesa la tienda cada noche.“Esa ha sido probablemente una de las partes más desafiantes del proceso, pero también una de las más gratificantes porque una vez que puedes superar esos desafíos de manera simple, obtienes un [resultado] realmente excelente”, dijo Gradon.El esfuerzo de etiquetado RFID se puso a prueba en Seattle en la tienda con la marca anko de Kmart Australia.Desde entonces, el concepto se ha transportado a Australia, aunque con algunos ajustes, ya que las tiendas anko tienen una huella más pequeña y un menor volumen de existencias con el que lidiar.Una de las claves del éxito es que todos los proveedores de Kmart, con sede en países como China, India y Bangladesh, adjunten las etiquetas RFID en el punto de fabricación.Checkpoint Systems, cuyo negocio de soluciones de etiquetas para prendas de vestir ha estado involucrado en el trabajo desde los comienzos en anko, ha utilizado su alcance global para trabajar de cerca con los proveedores en el país en procesos simples para colocar las etiquetas en los artículos.Algunos artículos, como los juegos de cubiertos, requerían capacitación específica sobre la colocación de etiquetas, ya que los artículos en sí mismos podían causar interferencia, además de los accesorios de la tienda en los que se exhibían.Gradon agregó que la implementación de la tecnología RFID había "proporcionado una base para una transformación de varios años de la experiencia del cliente en la tienda" en Kmart Australia, que brindaría "eficiencias operativas y un valor aún mayor para nuestros clientes".